Un
joven alejado de su casa gracias a la política de la Revolución Cultural será destinado
como profesor en un pueblo pobre y lejano de la China rural. Allí los muchachos
lejos de ser los niños ignorantes que esperaba son despiertos e inteligentes.
Sobresale entre ellos un chico que criticará desde el principio la labor del
maestro. La humildad del pueblo chino en todas las situaciones demostrará una vez
más como un profesor puede aprender de un alumno sin que ello constituya un
elemento de ofensa. El muchacho que trabaja ayudando a su padre y por la noche
estudia hasta tarde ha decidido copiar un diccionario para perfeccionar el uso
de los caracteres. Sin embargo el profesor e muestra, dentro de los limites
sociales, un innovador ya que intentará cambiar radicalmente el modo de
estudiar de estos niños. Sin material didáctico disponible, cambiará la
tradicional forma de estudiar por una más participativa en la que los
conocimientos serán puestos en común y analizados entre todos. Los bellos
paisajes a los que nos tiene acostumbrados Chen no faltarán en esta ocasión. El
uso del personaje en su mínima expresión dando importancia a al escenario serán
otra de sus características más sobresalientes ofreciéndonos postales
cinematográficas de la vida cotidiana.
Silvia
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