Dom ha pasado 12 años en la cárcel por no haber
querido delatar al jefe de la banda, el señor Fontaine. Cuándo por fin llega el
día, Dom se pasa por la casa de Fontaine para recoger su premio. Tras una
altercado inicial finalmente deciden el precio de su libertad pero un accidente
tras una juerga loca cambia el rumbo de la vida de Dom. Sin dinero, sin
trabajo, sin familia decide recuperar algo de su pasado. Su hija no le habla y
no parece tener ningún interés en recuperar un padre que nunca tuvo. El trabajo
tampoco lo tiene ya y no parece que nadie se fíe de él. Pero la suerte llega sólo
cuándo se ha tocado fondo, sólo hay que decidir lo que se desea en realidad.
Una película sobre la que no llegan las palabras para describir lo inútil e insípida
que resulta. Pésimas interpretaciones, un guión absurdo y alargado en demasía y
una historia que no cuaja ni interesa.
Silvia
No hay comentarios:
Publicar un comentario