miércoles, 26 de agosto de 2015

Canción de hielo y fuego: Festín de cuervos de George R. R. Martin. (A Feast for Crows, 2005)


Pocos reyes han sobrevivido. Las guerras, las venganzas, las intrigas han mermado el número de dirigentes que antes se erigían sobre la cumbre del mundo. Nada queda de las casas antaño nobles. Sus hijos han caído en el campo de batalla o en el la vergüenza del deshonor acabando con el prestigio milenario de grandes casas tocadas por los dioses. El futuro es incierto. Adultos que juegan al juego de tronos, el más peligroso al que se haya asistido en los últimos tiempos. Ni si quiera un rey loco consiguió desestabilizar de este modo un reino que abarcaba los siete mundos. Un niño que ha tomado el trono sustituyendo a otro niño. Aún más pequeño, aún mas débil manipulado por una madre en lucha permanente pero sobre todo acuciada por una antigua premonición que se está materializando ante sus ojos ciegos por la codicia y el orgullo. Encadenada por sus propios errores no aprenderá de ellos sino que arropada por ellos se deslizará hacia su autodestrucción. Un hombre enamorado descubrirá que el mundo ya no es como antes. Un hombre que ya no sabe ser cruel pero que ha aprendido a ser justo perdiendo lo que más quería. Dos niñas perdidas, la mayor, joven y hermosa envuelta en las garras de la intriga, entregada por un reino, aprenderá junto a él mejor a convertirse en una mujer adulta. La pequeña confundida por los deseos de venganza llegará en barco a su verdadero destino, aquel en el que aprenderá a no ser nadie, a abandonar su pasado y concentrarse en una misión incierta pero decidida por un dios de muchas caras. El valor y la honradez que todavía existen en el mundo condesada en unas pocas almas no desaparecerá tras el ruido del acero. Una promesa que no se puede olvidar y una mujer armada de un secreto intentarán cambiar el curso de los acontecimientos. Un joven de fiero corazón, de ilustre estirpe castigado por el destino, demostrará que un hombre honesto podrá superar los obstáculos impuestos por la ley de la sangre. Una alianza que salve a todos los pueblos antes la amenaza que despierta la noche le devolverá el sabor de la sangre a los labios traicionado por los hombres a los que juró proteger. 
Silvia

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