Las ventajas de ser un marginado son múltiples
y de diversa índole. Para empezar no está tan mal que los chicos de moda de las
escuela pasen de ti. Es perfecto. De esta forma conocerás a los más extraños y
divertidos. Esos que justamente se parecen a ti. Esos chicos organizan fiestas,
van a bailar, les gusta pasar su tiempo libre juntos y se divierten lejos de
los prejuicios de los adolescentes estirados que pululan por el instituto. De
todas formas aunque encuentres un grupo de amigos no todo es fácil en la vida
de un adolescente. Se enamoran, se dejan, se pelean. Por mucho que lo intenten
no consiguen comprender todo y algunos retazos de sus vidas se pueden volver a
presentar de pronto para que al fin todo se tambalee y se vuelva al punto de
salida. Pero lo importante es estar rodeado de gente que te quiera, que te
apoye y que siempre este ahí justo cuando la necesites para dejar de lado los
aspectos más superficiales de la vida. Un película que no sólo trata el tema de
los adolescentes marginados si no que nos abre las puertas a una realidad que
de algún modo nosotros todos hemos vivido y sufrido. Interesante y entretenida,
el tema tratado no le resta interés si no que aumenta su profundidad.
Silvia
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