sábado, 29 de noviembre de 2014

Choque de reyes de George R. R. Martin. (A Clash of Kings, 1998)


Y todo se ha venido abajo. El precario orden que dependía del rey Robert se ha desmoronado tras su muerte y todos tienen pretensiones al trono. Sus dos hermanos, que han decidido enfrentarse entre sí para optar al mismo. Los Stark encabezados por Robb, el hijo mayor, que busca vengar a su padre, recuperar a sus hemanas y reinar en el norte, destruyendo así la unidad creada por los Targaryen. Mientras tanto, en Desembarco del rey, el trono de espadas pertenece al hijo del incesto, hijo de una madre sin escrúpulos que no consigue dominar a su hijo, consciente de lo que puede perder pero intentando convertir el fracaso en éxito. Pero la nueva mano del rey, su hermano Tyrion, no se lo pondrá fácil, dotado de un gran cerebro y sin ningún atributo de caballero, pondrá en marcha diversas estrategias que aclaren una situación oscura como el invierno que se acerca. Y promete ser largo. Más allá del muro se suceden acontecimientos extraños, olvidados ya por los humanos pero no por ello nuevos y desconocidos. Vivos todavía en las leyendas, buscarán el camino de vuelta entre los vivos a través de un pueblo salvaje que parece haber despertado de su letargo. Más lejos todavía, más allá del mar Angosto, una niña intenta recobrar lo que le pertenece por derecho propio, una joven madre de dragones que levanta expectación allá por dónde pasa pero que todo se reduce a cenizas cuándo llega el momento de la verdad. Y es en busca de esta verdad que todos luchan entre sí ignorantes de peligros más acuciantes que acechan a todos y cada uno de los mortales ya que no todo se puede entender ni dominar cuándo la carne es mortal y los muertos y espíritus caminan de nuevo entre los vivos.
Silvia

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